Esta frase es tan popular y parece tan fácil comprender su significado que parecería entonces que cualquier persona que esté dispuesta a lograr algo nuevo en su vida, seguramente se atrevería a correr riesgos.
Pero, en la realidad, esto no es así.
Las estadísticas indican que el 98% de las personas NO tienen claro qué es lo que quieren y las pocas que SI lo tienen claro, al presentarse los primeros obstáculos… se dan por vencidas, el miedo se apodera de ellas, y prefieren mejor ya no seguir intentando.
Si vemos la biografía de hombres y mujeres de éxito, encontraremos que el común denominador de todas es que tenían muy claro lo que querían, y no se dieron por vencidas hasta lograr sus sueños, y no lo lograron a la primera.
Veamos por ejemplo a Tomas Alba Edison, para inventar el foco, fracasó miles de veces, hasta que lo logró; a Walt Disney lo tomaban como loco y nadie aceptaba su proyecto; El Coronel Sanders, fundador de la franquicia Kentucky Fried Chicken, tocó más de 1000 puertas, hasta que finalmente pudo ofertar su receta y convertirla en franquicia… y así se repiten una y otra vez los casos de éxito.
Las personas exitosas luchan por lo que quieren, se arriesgan y no dan marcha atrás hasta lograr lo que quieren.
Reírse es arriesgarse a que se burlen de tí,
Llorar es arriesgarse a que muestres tus sentimientos,
Buscar a otro es arriesgarse a involucrarte.
Mostrar tus sentimientos es arriesgarse a ser tú mismo,
Hablar de tus ideas es arriesgarse a perderlas,
Amar es arriesgarse a ser rechazado,
Vivir es arriesgarse a morir,
Tener esperanza es arriesgarse a no obtener lo que esperas,
Tratar es arriesgarse a fallar.
Podrás evitar sufrir si no te arriesgas, pero no aprendes, no sientes, no creces, no amas, no vives.
El mayor peligro al que te puedes enfrentar es a no arriesgar nada. La persona que no arriesga nada, no hace nada, y no obtiene nada, sólo la persona que se arriesga es libre .
Cuando te levantas por la mañana y te sientes tan bien y con muchas ganas de vivir un día extraordinario. Comienza tu día, sales de tu casa y ¡tú te sientes tan bien!, pero de pronto alguien te hace un comentario negativo que te enfurece, las cosas no salen como quieres y aquel proyecto que esperabas que fuera un éxito, te lo rechazan… comienzas a pensar… ¿de qué sirve entonces que yo quiera vivir feliz si todo en mi vida es negativo?
Y comienza la letanía : ” a mí nunca me va bien”, ” soy un imbécil”, “ya dejo a un lado todas esas tonterías de pensamientos positivos que no sirven para nada”, “mi mala suerte siempre me persigue”…etc…etc
Cuando te sientas así… recuerda: las personas exitosas no son personas que no tienen problemas, sino que han sabido cómo resolverlos… cómo: enfocándose en la solución y no en el problema y teniendo muy claro que nada ni nadie los detendrá hasta que logren su propósito…
La única diferencia entre las personas existas y tu, son sus resultados y recuerda: SI ELLOS PUEDEN… ¡¡¡ TU PUEDES!!! ¡¡¡ARRIESGATE !!!!
(Desconozco su autor/Tomado de "!El poder interior")
